¡Comenzamos Juegos de Olfato!
En este apartado, vamos a tratar sobre trabajos de olfato y detección. Para nuestros pequeños es absolutamente esencial usar su nariz, son animales que viven en un mundo de olor , los humanos vivimos en un mundo de colores, ellos en un mundo de olores.
Durante las semanas que dure este encierro iré proponiéndoos diferentes ejercicios relacionados con la nariz del perro, serán juegos y ejercicios lúdicos en los que lo vamos a pasar genial todos los miembros de la familia, empezando por , como no podía ser menos, nuestros perro.
Dependiendo del ejercicio os iré proponiendo diferentes escenarios de la casa, ya veréis que todo o que vamos a proponerse puede hacer en cualquier residencia. E igualmente, os iré proponiendo diferentes herramientas que nos harán falta para desarrollar estos juegos, serán cosas fáciles de tener en casa, no vamos a construir estructuras raras jejeje.
En este primer juego, sólo necesitamos algún tipo de refuerzo sabroso y apetecible que sepamos gusta a nuestro compi peludo. Podemos desarrollarlo en cualquier habitación de la casa, y nos vamos a limitar a tirarle trozos pequeños de premio por diferentes partes de la estancia para que los huela y los coma. Es algo parecido a echarle el maíz a las gallinas, o echar sal sobre una gran sartén… Un movimiento amplio de mano que nos permita esparcir unos cuantos premios de una tacada y que nuestro pequeño se entretenga buscándolos y disfrute comiéndolos. NO hay una orden de busca, simplemente cuando nuestro perro vaya a buscar y coger le diremos en voz calma pero animada la palabra BARRE. En pocas series nuestro perro entenderá perfectamente el significado de este comando, y nos permitirá ampliar los tiempos y las dificultades de forma progresiva y que, ya sabéis, no se trata de hacerlos másters del universo…se trata de pasarlo bien y divertirnos.
Por cierto, el juego del que hablamos , una vez observamos que está entendiéndolo y que lo disfruta, se complica. Tras un par de series con la habitación en condiciones normales, haremos una en la que justo cuando lanzamos los premios al suelo apagaremos la luz. Sí, hay que hacerlo completamente a oscuras , porque de esta forma nos aseguramos que nuestro perro usa su nariz y se esfuerza por buscar el premio, a la par que trabajamos un aspecto fundamental para los trabajos de detección : nuestro perro ha de ser capaz de confirmar la existencia de una sustancia sin tener la capacidad de verla. Es decir, han de ver por su nariz, han de otorgarle a su nariz la condición de infalible detectora.
